Cornalina

La cornalina, también llamada carneola (tonalidad más translúcida), o piedra sardónica (tono más marrón), es una de las piedras más conocidas de la familia de la calcedonia, de color rojizo. Es más apreciada cuanto más translúcida y con un color rojo-anaranjado; el color rojo se debe a la presencia de óxidos de hierro, mientras que los tonos más claros se pueden atribuir al hidróxido de hierro.

Yacimientos importantes de cornalina los podemos encontrar en Gran Bretaña, India, República Checa, Perú, Islandia y Rumanía.

Se asocia a los signos de Virgo y Capricornio.

Propiedades de la cornalina

La cornalina nos ayuda a conectar y a abrir nuestro chakra raíz, que rige la sexualidad, las emociones pasionales y la creatividad. Respecto a los órganos sexuales, puede ayudar a superar disfunciones sexuales leves o apatías en este terreno.

Es una piedra, además, estabilizadora de la alta energía, que ayuda a restaurar la vitalidad y la motivación, y estimula la creatividad.

Mentalmente mejora las capacidades analíticas y clarifica la percepción. Es poderosa contra la envidia, la rabia y el rencor, tanto de uno mismo, como protectora de ataques de otras personas.

Es una piedra llena de fuerza y vitalidad, que ayuda en problemas de la parte baja de la espalda, alivia el reuma, la artritis, la neuralgia y la depresión; regula los fluidos corporales y los riñones, y acelera la curación de huesos y ligamentos.