La aromaterapia es un tipo de tratamiento terapéutico de los llamados alternativos que emplea aceites esenciales o líquidos aromáticos de plantas, cortezas, hierbas y flores con el fin de ayudar a nuestro organismo.
Fueron los egipcios quienes se iniciaron en el arte de extraer las esencias de las plantas calentándolas en recipientes de arcilla; más tarde, los alquimistas griegos buscaron la forma de preservar la fragancia y las propiedades curativas e inventaron la destilación para obtener aceites esenciales puros.
El uso de estos aceites esenciales se realizaba también desde hace milenios en China, India y Persia; los vedas también utilizaban aceites para su medicina.
Actualmente y debido al auge que han tenido las terapias alternativas en las últimas décadas la Aromaterapia ha sido redescubierta y confirmada como una terapia efectiva para la curación e integración del ser humano.
Cada planta aromática elabora un conjunto característico de aceites esenciales, y según el tipo de planta, esta almacena los aceites esenciales en distintas partes: raíz, hojas, cortezas, yemas, flores, fruto o semillas.
Así pues, los aceites esenciales son "el alma de la planta", su "energía vital" y constituyen el medio por el cual se transmiten todas sus propiedades naturales.
Son sustancias aceitosas volátiles, extractos vegetales altamente concentrados, que contienen hormonas, vitaminas, antibióticos y antisépticos. Constituyen la forma más concentrada de energía herbaria.
Estos aceites esenciales pueden obtenerse por varios métodos: destilación, extracción, eufleurage ( proceso en el cual se utiliza grasa como disolvente)…
Los aceites actúan por dos vías: a través del olfato y a través de la piel.
Al inspirar las pequeñas moléculas del aceite esencial que se encuentran en el aire (evaporación mediante hornillos, o inhalación directa), son llevadas a los pulmones, donde se produce el intercambio gaseoso, proceso por el cual pasan al sistema circulatorio. Por otro lado, mediante la aplicación de cremas, lociones, aceites, baños aromáticos, compresas (frías o calientes), loas minúsculas moléculas del aceite esencial atraviesan la piel (epidermis) y alcanzan la capa más profunda (dermis), donde los numerosos capilares que se encuentran en ella las absorben, transportándolas al sistema circulatorio.
Características de algunos aceites son:
Albahaca: Se obtiene por destilación al vapor de la planta en flor. Se utiliza para el dolor de cabeza y migrañas, también para la fatiga mental y trastornos digestivos.
Alcanfor: Se obtiene por destilación al vapor de la madera, raíces y ramas. Es un excelente tónico y estimulante general, que posee también acción analgésica y antirreumática. Se utiliza también para aliviar enfermedades nerviosas y respiratorias.
Árbol de té: Es destilado al vapor de las hojas de los árboles de té australianos.
Es un buen antiséptico y actúa como antimicrobiano y estimulante del sistema inmunitario.
Cajeput: Se obtiene mediante destilación al vapor de las hojas y ramitas frescas. Es un aceite antimicrobiano, expectorante.
Ciprés: Se obtiene por destilación al vapor. Despeja las vías respiratorias altas y ayuda en la circulación de las piernas.
Eucalipto: Se obtiene por destilación al vapor de las hojas. Es de gran utilidad para el aparato respiratorio, ya que es descongestivo.
Lavanda: Se obtiene por destilación al vapor de los brotes florales frescos. Es un sedante muy efectivo, se utiliza en problemas de insomnio. Ayuda a balancear estados emocionales como histerias depresiones, calma, relaja.
Limón: Se obtiene por extrusión de la corteza. Se usa como estimulante mental, antiséptico, astringente, cicatrizante.
Mandarina: También se obtiene por extrusión de la corteza. Es calmante y sedante, y brinda alegría.
Menta: Se obtiene por destilación al vapor de las hojas. Estimula el cerebro, y ayuda a despejar los pensamientos.
Naranja: Se obtiene por extrusión de la corteza. Se utiliza como antidepresivo y elevador del espíritu. Es sedante y regenerador e hidratante de la piel.
Patchuli: Se obtiene por destilación al vapor de las hojas secas. Actúa como regenerador celular, por lo que ayuda a tener un aspecto sano de la piel, luchando contra el acné y la dermatitis. También es utilizado como estimulante.
Pino: Se obtiene por destilación al vapor de las agujas. Es un buen estimulante del sistema nervioso, brinda energía y bienestar. También posee un gran poder antiséptico. Refresca y suaviza el pecho y las vías respiratorias.
Romero: Se obtiene por destilación al vapor de las flores. Estimula la memoria, la claridad mental, procesos creativos y es un protector psíquico y un estimulante físico.
Salvia: Se obtiene por destilación al vapor de las hojas. Es un tónico general de gran eficacia, que ayuda a mitigar las enfermedades respiratorias y las infecciones e inflamaciones bucales.
Ylang Ylang: Se obtiene por destilación al vapor de las flores frescas. Es muy relajante, sobre todo en casos de estrés y valorado también como afrodisíaco.
Hay algunos aceites esenciales que pueden irritar las pieles sensibles, por lo tanto hay que tener cuidado a la hora de utilizarlos directamente sobre la piel. Si se compran los aceites, lo mejor es leer muy bien las instrucciones o asesorarse por un experto antes de usarlos.
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